La actriz francesa Marion Cotillard se ha instalado indiscutiblemente como la musa favorita de la era Raf Simons en Dior. A través de su belleza y talento, la ganadora del Oscar sorprende cada cierto tiempo con diferentes looks de la casa de moda, pero esta vez, lo hace de la mano del futurismo retro que propuso la firma en sus recientes temporadas. Bajo el lente del fotógrafo Peter Lindbergh —quien alguna vez lanzara a la fama a las supermodelos de los ’90—, Cotillard apela a una estética elegante para promocionar el bolso Lady Dior, el mismo que hoy es símbolo de lujo y que apareciera, por ejemplo, en la película “La piel que habito”, de Pedro Almodóvar el año 2011.