El maximalismo acostumbrado, peinados altos y un camino de fuego fueron parte del show de Gucci en Arles, Francia. Esta temporada, Alessandro Michele mostró una línea inspirada en “la idea de la muerte” y el romanticismo, también vimos guiños de desfiles clásicos de Alexander McQueen como en la propuesta de una pasarela de fuego. Gucci se convirtió en la tercera casa en mostrar su colección Cruise 2019 en Francia; primero fue Dior en Chantilly, luego Louis Vuitton en Saint-Paul de Vence en la Riviera francesa. Ahora, la casa italiana se presentó en Arles, específicamente en Alyscamps, una de las necrópolis romanas más famosa del mundo antiguo.
Y no es de extrañar que escogieran Francia como sede, hace unos días la firma anunció que se saltarían Milan Fashion Week para llevar su show a Paris Fashion Week, esto como un “homenaje en tres partes a Francia”, así lo explica Alessandro Michele, quien no suele alejarse demasiado de la estética por la que se ha hecho conocido.
La pasarela mostró esa actitud gótica que todos reconocemos de la marca más la accesibilidad del streetwear. El vestido final fue un camisón de cuello alto, victoriano y casi fantasmal el cual complementaron con un colgante de cruz.
La mayoría de la colección no presenta esta “idea de la muerte”, muchos elementos son básicos combinables. Las telas de las prendas fueron una mezcla de seda, terciopelos y tul, las polainas y las mallas también aparecieron, incluso estampados de leopardo, lentejuelas y encajes.
Fotos: Vogue
