Durante las últimas décadas, Japón, China, Corea y otros lugares asiático, se han convertido en fuente de alimentación importante para tribus urbanas occidentales y estilos que son catalogados como extravagantes. Las calles de Harajuku en Japón o los animé son lugares de culto para muchas lolitas, decora u otros integrantes de diferentes estilos, pero alguna vez la influencia corría hacia el otro lado. Durante los años ’60, un libro capturaría el estilo de los universitarios de elite norteamericanos y se transformaría en una guía de vestir para miles de asiáticos. Ese libro se llamaría “Take Ivy” y fue publicado en 1965.
La marca de ropa Van Jacket decidió adoptar estilos occidentales para ampliar su oferta, y en 1965 envió al fotógrafo Teruyoshi Hayashida a fotografiar a distintos estudiantes universitarios de lugares tan famosos y selectos como Princeton, Harvard y Dartmouth. Así, el jersey de números estampados, los blazers con jeans y mocasines y camisas por doquier, fueron introduciéndose a un estilo ampliamente reconocido como preppy, el cual marcó la pauta dentro del vestir masculino japonés en los años ’60 y ’70. A través del libro “Take Ivy”, la generación del rock and roll en Japón le rendiría culto de minimalismo y elegancia extremos, algo que perduraría por mucho tiempo y que llevaría a varios jóvenes a incorporar guiños a la marca Van Jacket a su propio guardarropas y complementos.
Durante muchas décadas, a “Take Ivy” se le ha considerado una especie de biblia de la moda dentro del vestir en Japón. A pesar de mantener tantas diferencias con lo que normalmente sería relacionado con los habitantes de sus coloridas calles y tecnológicos panoramas, el desarrollo de un estilo tan común en Norteamérica como el preppy, especialmente aquel que se encuentra en las Ivy Leagues o universidades y fraternidades de prestigio socioeconómico, marcaría la pauta en estilo y street style, pero además se convertiría en uno de los primeros testimonios de street style verdaderos registrados antes de la explosión de blogs y fotógrafos.
Fotos: The Trad.