El pasado domingo 30 de marzo, Lollapalooza se repletó de gente en una versión que terminó con resultados más que positivos, tanto para los asistentes como para los organizadores. Entre las bandas de cabecera, estuvo nada más y nada menos que Arcade Fire, la banda más esperada desde que lanzaron su último LP Reflektor en octubre 2013, que contó con la colaboración de inminentes figuras de la música, como James Murphy —quien lo produjo— y David Bowie, entre otros.
Una de las cosas que más llama la atención de Arcade Fire es su vestuario, tanto en el escenario como en la producción para sus videoclips. A finales del año pasado, la banda fue objeto de controversia al pedir que sus fans se vistieran de manera formal para sus conciertos. Debido a las duras críticas que recibió el comentario, tuvieron que publicar un segundo anuncio haciendo hincapié en que la medida no era obligatoria y pidiendo a todos que se lo tomaran con mayor relajo. Noel Gallagher, el ex-Oasis, dijo que la música de la banda es “mierda disco”, y agregó en relación a la medida del vestuario formal: “¿Sabes cuál es el punto de eso? Apartarse de la mierda disco que está sonando en los parlantes, porque ahora todo el mundo anda vestido como uno de los tres mosqueteros en ácido”.
Y a pesar de que la medida de los canadienses resultó exitosa en algunos conciertos, es imposible no centrar la atención especialmente en el vestuario y en la puesta de escena de la banda misma. Hace años que la diseñadora de vestuario encargada de dar vida al esplendor y el brillo de la banda canadiense es Renata Morales, artista visual y textil nacida en México, radicada desde hace más de 20 años en Montreal, Canadá.
Una vez graduada de la Escuela de Arte, Renata trabajó con un creador de patrones de alta costura. Así diseñó su primera colección en 1996, usando telas pintadas a mano. El 2001 ya tenía dos boutiques, situando el diseño emergente en grandes compañías franco-canadienses como Denis Gagnon y Marie Saint Pierre. Sin embargo, como sus piezas llenas de detalles implicaban un intenso trabajo de mano de obra, y a medida que se fueron sumando nuevos diseñadores al trabajo colaborativo, Renata comenzó a hacer trabajos por encargo y a medida, concentrándose sobretodo en la parte creativa de los diseños.
Su trabajo en vestuario se compone de diferentes texturas, ricas en materiales y colores. Utiliza pliegues y bordados para crear nuevas formas. Las lentejuelas son infaltables; cubren una capa de tela de encaje, se emplazan en las costuras o son adheridas a una falda de tul para dar un toque flapper. Renata también transforma el terciopelo, el tul y la lana en creaciones complejas. Por ejemplo, en flores de tela o “locura inspirada en aves”.
Los increíbles diseños de Morales han vestido a Arcade Fire en distintos contextos. Por ejemplo, sus vestidos resplandecen en Régine Chassagne en el video de Sprawl II (Mountains Beyond Mountains), además de figurar en los últimos trajes para Reflektor. Pero no solo eso. También fue contactada por Grimes para diseñar el vestuario de su video Crystal Ball.
Todos sus diseños pueden ser vistos y encargados en su página web renatamorales.com, donde demuestra el poder de las formas que alberga el nuevo diseño emergente, hoy más consolidado que nunca.