Jovial, relajado y lúdico son los tres conceptos que en esta ocasión se han apropiado de la propuesta “Vestí Arte” de Poty Hernández para esta temporada primavera-verano. Siguiendo su sello único, la diseñadora argentina recibe una vez más el aporte del arte, esta vez representado en estampados que a momentos nos remiten a los de Jean Michel Basquiat en los 80. Una gran hazaña si se piensa que los logró incluir en prendas de estilo oriental, llegando a un resultado totalmente coherente que puede ser usado por mujeres de todas las edades y de gustos diversos.
Con el foco 100% puesto en los estampados, la colección adquirió fuerza sin la necesidad de estructuras demasiado complejas para apoyarse. Las figuras y dibujos, en colores básicos como el rojo, azul y amarillo, brindaron luminosidad a un fondo hecho de telas livianas casi siempre blancas o negras.
Las prendas portadoras de los coloridos dibujos fueron en su mayoría largos y holgados vestidos tipo túnica y poleras sin mangas, cuya versatilidad aprovechó la diseñadora para combinarlos con ropa de diversos estilos como short deportivos o pantalones pata de elefante. Además, la presencia de los tejidos que se vieron en poleras de algodón crudo y en cómodas zapatillas de suela plana, aportaron en el discurso de comodidad y aumentaron el abanico de posibilidades en la combinación de prendas y ocasiones de uso.
Una colección bien lograda que apostó por la exclusividad en el vestir cotidiano, que tanto se valora en estos días. Vestir el arte –como dice el discurso de la marca–habría sido más impactante con una perfomance audaz y una mayor intervención en las pasarelas de Raíz Diseño, aunque de todas formas dejó al público feliz y satisfecho.