Poco después de la hora presupuestada, empezaron a llegar los invitados. Willy Geisse arribó con una de las chaquetas más conservadoras que se le han visto, negra y con bordes metálicos que simulaban un cierre. Del brazo de Willy, se mantuvo toda la noche una de las habitués de Vistelacalle, la elegantísima Ana María Ilabaca, que ya en dos ocasiones ha sido protagonista de la foto principal de la página.
Vestía un little black dress, pelo tomado y llevaba una cartera verde con asas de perlas. La elegancia personificada. Entre los mozos que servían champagne y vino blanco, se veía al coolísimo Nicolás López, director de las películas Promedio Rojo y Santos, conversaba animadamente con sus amigos y amigas igual de estilosos. Rosita Parsons, ¡que mujer más alta, por Dios!, llegó enfundada en brillos, su abrigo y su Jersey XL: ambos tenían un toque brillante. Juanito Yarur, miembro del jurado e infaltable de todo evento social, fue el compañero de plática durante casi toda la noche de Rosita. Juanito llevaba una chaqueta negra algo ceñida y con los bordes de la solapa en blanco, al igual que su camisa también blanca. Nara, la animadora de “Chicas” de Via X, llegó pasadas las 8 y definitivamente se robó los flashes de los camarógrafos de distintos medios que cubrían el evento.
El momento más importante de la noche, la premiación del concurso Vistetulaptop, que convocó a muchos jóvenes diseñadores que mandaron sus propuestas para darle onda a los notebooks, sucedió a eso de las 20:15. Majo Arévalo, la flamante directora de Vistelacalle, subió al podio vestida por el diseñador nacional Paulo Méndez y dio el discurso protocolar. Estupenda. Luego más discursos, Rodrigo Guendelman, conductor del programa radial Divertimento, habló a nombre del jurado (Rosita Parsons, Osvaldo Luco, Juanito Yarur, Elizabeth Moncada y Rodrigo Guendelman) y a título personal agradeciendo iniciativas como estas. Su pinta lo hacía parecer el rockstar de la noche. Posteriormente, hablaron los representantes de Paris, Intel y Samsung, las marcas con las cuales se hizo en conjunto este concurso de diseño, todas muy involucradas en proyectos de diseño emergente. Finalmente, se inició la premiación; desde el ganador del tercer lugar, hasta la ganadora del primer premio, todos coincidieron en la necesidad de más espacios como aquellos para los diseñadores independientes.
César Morales, quien se hizo acreedor del tercer lugar, mostró orgulloso su creación, un modelo eco friendly que tenía como principal objetivo el reciclaje de bolsas plásticas que se entrelazan para darle forma a la funda.
El segundo lugar, que recayó en Gabriela Ríos, se trataba de una funda enfocada principalmente en la funcionalidad y en la estética. Su diseño con decenas de círculos acolchados se perfilaba como una especie de protección del notebook ante eventuales caídas y pretendía, al mismo tiempo, según su diseñadora, ser una práctica cartera de mano.
La ganadora, la diseñadora Laura Rosenblitt se llevó un notebook Samsung x420, además de la producción de 200 de las fundas que ella diseñó y que serán posibles de adquirir en la tienda París. Su diseño de un material muy flexible y ecológico, según sus propias palabras, fue proyectado en función precisamente a esas dos características.
En definitiva, el concurso fue un espacio de intersección entre el talento joven y la plataforma comercial que significa el trabajar con grandes marcas, dándole la posibilidad a los diseñadores de acceder a un mercado más amplio.
Luego de la premiación, todos invitados al cóctel. Las risas, el murmullo y el sonido que las copas hacen al chocar se hicieron sentir, para luego hacerse cada vez más débiles a medida que las modelos, diseñadores y demás invitados iban dejando el lugar, después de haber disfrutado de las delicatessen ofrecidas por las mozas. Los flashes también disminuían paulatinamente. Momento de irse.