La edición fue clave para la muestra que hizo Paulo Mendez de su colección primavera-verano 2012. La propuesta que presentó hace unas semanas en Santiago de Moda, contó con 30 outfits, lo que provocó inconexiones entre las diferentes pasadas. Nada de eso sucedió en esta ocasión, ya que por el contrario, lo que vimos fue un relato coherente y resumido de su colección Self Injury.
Esta propuesta habla de un pasado sufrido, en el que a través de dolorosas experiencias y lecciones, nos adaptamos a cambios y nos reacomodamos en nuestro self. Esta etapa en nuestras vidas se ve reflejada en el uso de colores apagados y sobrios, amarras que ahogan y que se transforman a medida que avanza la colección para, finalmente, gracias a las dos últimas pasadas, liberar este proceso interno y crudo. Los dos últimos vestidos, uno con bordados de flores y el otro con una aplicación de tela impermeable plisada, son los que más se alejan de la línea para dar un final optimista y aliviador.
Para construir esta colección, Paulo se inspiró de la estética oriental, cosa que siempre aparece entre sus creaciones. Esta vez, las telas protagonistas las eligió en negro, gris y blancos puros, colores planos a los que le dio el acento a través del verde limón, calipso y estampados de cuadrillé .
www.paulomendez.cl
Fotografía por Leonardo Vidal:
