Imágenes que destacan por su factura nostálgica, intercaladas con fantásticas escenas o características que apelan a problemáticas actuales. El artista belga Sammy Slabbinck, superpone en sus composiciones o collages distintos imaginarios que finalmente dan como resultado un atractivo estilo, que ha sido poco a poco destacado en Internet por su frescura y también por su técnica; la revista The New Yorker y hasta la galería Saatchi han destacado su trabajo como uno a tener en cuenta durante los últimos meses.
Para muchos, Slabbinck combina de manera perfecta el humor y el horror a través de sus collages, trabajos que provienen de una técnica que se le atribuye a los cubistas pero que nunca ha pasado de moda. Son numerosos los artistas alrededor del mundo que posicionan sus nombres a través de esta técnica tradicional, que permita mirar hacia atrás y también hacia adelante en una sola fotografía. Su imaginario real proviene de revistas de los años ’50 y ’70, permitiéndole al artista jugar con una saturación de color propia de la época. Mientras algunos de sus trabajos están acomodados de manera digital, otros lo hacen con una tradición de cortar y pegar que también resulta única en una era donde todo está procesado digitalmente.
Uno de los hechos más sorprendentes es que Slabbinck nunca estudió en la universidad; ni artes plásticas, ni diseño, ni arte se han cruzado en su formación autodidacta de manera formal. A pesar de ello, ha logrado mantener su propia galería de arte y expresar sus interpretaciones gráficas de hoy, las cuales lo han llevado incluso a colaborar con artistas musicales menores para componer sus carátulas de discos y también dirigir videos musicales. Hasta Vines ha montado de manera virtual el artista para marcas como Hewlet Packard, lo cual le ha ayudado a complementar de manera perfecta el trabajo logrado a través de las imágenes del pasado recopiladas en distintas ventas de garage.
Fotos: Tumblr oficial.
