Desde el momento en que nacemos, nuestro cuerpo está destinado a habitar en un espacio determinado. Podría parecer una afirmación obvia, sin embargo pocas veces nos percatamos que antes de vivir en una casa , habitamos dentro del vestuario. Todos sin excepción, al despertar tenemos que elegir aquellas prendas que van a comunicar al resto del mundo quiénes somos o quiénes queremos ser, nuestros estados de ánimo y en general, nuestra personalidad. Lo que usamos habla por sí solo, lo queramos o no.
Lo interesante de todo esto, es que si bien lo que nos ponemos es un fiel reflejo de lo que nos pasa internamente, también puede suceder a la inversa. Es decir que la ropa también tiene el poder de modificar en alguna medida nuestra situación actual. Es lo mismo que sucede cuando nos cambiamos de casa: inmediata e inevitablemente nuestra vida se ve influida por el espacio y esto genera cambios en nuestras vidas. Como dicen por ahí “casa nueva, vida nueva”. Lo importante es hacer de estos casos algo positivo.
Es por esto que si pretendemos utilizar nuestro clóset para comenzar una nueva etapa, el paso inicial será renovarlo. Si lo que buscamos es empezar con el pie derecho entonces lo primero es segmentar dentro de lo que tenemos. Aprovechando la primavera, lo mejor es dejar de lado los colores y tonalidades oscuras (Aunque siempre es bueno dejar una que otra prenda negra para la noche) y dejar solo aquella que nos queda bien. Luego viene la mejor parte: salir a comprar.
Aprovechando las tendencias del color block y las siluetas femeninas que trae consigo el clima cálido, es mucho más fácil encontrar ropa que nos siente bien y nos haga sentir animadas. Cada color tiene un significado para nuestro subconsciente, factor que deberíamos tener en cuenta al momento de elegir. Por ejemplo el rojo es un color potente que te brindará energía y dependiendo de la prenda, sensualidad. El verde y el azul por otro lado otorgan tranquilidad y paz. En cuanto a la silueta, para cada cuerpo hay opciones diferentes, pero siempre es positivo acentuar aquellas partes que más nos gustan.
Así que ya saben, si quieren comenzar la época estival con la mejor de las vibras, siempre son buenos los cambios y qué mejor que empezar por uno mismo.