Desde el 02 hasta el 06 de julio, la Alta Costura se instala en París y la esencia de la industria llega a través de distintos estilos con diseñadores de todo el mundo. Paris Fashion Week F/W 2017 toma elementos que ya hemos visto, adaptándolos a un público más juvenil, con novedades que llegaron de la mano de nuevos invitados.
Atelier Versace: Quizás la colección más prolija y emocionante de Versace por mucho tiempo, fue lanzada solo en un lookbook y presentada a puertas cerradas ante editores de revistas. Mantuvo un gran toque de nostalgia con elementos del archivo de Gianni, quien siempre unió arte, historia y kitsch a su propia manera, aunque esta vez, bajo la influencia de varios vestidos, Riccardo Tisci se hace cada vez más evidente como posible nuevo integrante.
Los norteamericanos: Rodarte y Proenza Schouler: Muchas tendencias y muchas flores anunciaron la llegada de dos asiduos a NYFW esta temporada: la marca de las hermanas Mulleavy y de Lázaro Hernández/Jack McCollough. Con una sencillez acorde a un impacto más comercial, recursos asegurados para sintonizar con una pasarela parisina pero al fin y al cabo muchos efectos para tan poca sustancia, Rodarte y Proenza Schouler consiguieron graduarse con su primer show en la meca de la moda.
Schiaparelli: Bertrand Guyon ha sabido imponer una estética fresca utilizando elementos del pasado, sin necesidad de copiar literalmente el archivo. Por eso vemos clásicos cortes en vestidos pero pequeñas sorpresas de color o detalles, además de una de las más divertidas propuestas cada temporada en la siempre seria PFW.
Guo Pei: Un despliegue de trajes y siluetas única es lo que muestra la diseñadora china, siempre invitada por la Chambre gracias a su arte y confección única. Pese a que la originalidad no haya estado tan presente en este show –así como tampoco los momentos sin aliento a los que nos había acostumbrado-, Pei sigue siendo un imperdible de esta semana.
Christian Dior: Una vez más, Chiuri se decantó por lo más sencillo y honesto de su factura: vestidos coquetos, austeridad años ’40 y un buen estilismo para encantar a sus musas famosas. Esta vez, el new look se vio encarnado por el azul piedra, el gris y los abrigos envueltos que llenaron la pasarela, justo a tiempo para los 70 años de aniversario de la casa.
Azzaro Couture: Hace muchos años era una de las marcas favoritas de Marisa Berenson, Angie Bowie y otras famosas pero hoy, es una pequeña casa con mucha tradición a cuestas. Aun cuando no le hace peso a otras marcas en esta oportunidad, Azzaro tiene sus pequeños destellos de elegancia, brillos y frescura que luego de la partida de Vanessa Seward se han visto ideados por Maxime Simoëns, una joven promesa que fue comparado con el propio YSL.
Giambattista Valli: El italiano que parecía estar repitiendo sus vestidos estilo repollo en cada pasarela, ahora varía y entrega colores vivos, drapeados, suavidad y muchos estilos variados, que fueron aplaudidos de pie por Celine Dion (ver cuenta de Instagram de Suzy Menkes).
Fotos: Runway.
