William Llewellyn Griffiths, el orfebre detrás de la marca reconocida por influenciarse en el arte del tatuaje, de la arquitectura gótica y del estilo barroco, crea preciosas piezas decorativas para el cuerpo y rostro. Instalado en Melbourne, Australia con su propio taller, William diseña joyas que combinan elementos actuales y otros derechamente medievales y góticos, para una variada carta de clientes. Los accesorios de Metal Couture han sido demandados tanto para películas como para clientes de la talla de Alexander McQueen, Vivienne Westwood, Dolce & Gabbana y del reconocido diseñador de zapatos Terry de Havilland.
hace treinta años, William Llewellyn Griffiths entró a trabajar como asistente en Hatton Garden en Londres y desde entonces su carrera como orfebre no ha parado. Uno de los favoritos de Australia nos deja el video de su última colección de joyas, piezas que se contornean, brillan y danzan como si se tratara de alguna bailarina en una cajita musical.
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