El año 2013, Katy Perry obtenía el premio a Mejor Cantante Femenina en los MTV European Music Awards con un traje de malla negra que no era de Chanel, Jeremy Scott o cualquiera de sus favoritos reconocidos. Ese traje era de la diseñadora española María Escoté, una marca que lleva bastante tiempo consolidándose en la vena más pop de la ropa europea, una que no tiene miedo de utilizar metalizados de colores o aplicaciones naif como parte del juego.
El traje de Perry correspondía a una de las propuestas de la temporada S/S 2014, pero la diseñadora lleva varios años sobre las pasarelas de Mercedes Benz Fashion Week Madrid, ex Cibeles. El 2010 lanzó su tienda online, antes que fuese coronada como uno de los mejores talentos el 2012, todo en base a un imaginario anclado en lo más profundo de la cultura popular. Así, Escoté llega a idear vestidos ajustados de punto con estrellas y el rayo de Bowie, vestidos de novia con bordados de corazones rojos y animal print en pantalones de pierna muy ancha.
Las últimas colecciones de esta diseñadora, la han llevado por el camino de las caricaturas de culto. Mi pequeño Pony y un saludo a los llamados bronies, arcoiris como los de Rainbow Brite y una cercanía peligrosa a lo que es Moschino con Jeremy Scott ha logrado la diseñadora, apuntando seriamente a un público juvenil atrevido y por supuesto, a estrellas de la música como Katy Perry. Por lo menos, otras como Paulina Rubio y Miley Cyrus ya han llevado prendas de María Escoté, confirmando su creciente popularidad internacional.
Fotos: Maria Escoté.