Anna Wintour junto al elenco de “Orange is the new black”, una de las imágenes de la cuenta en Instagram
Los foros que hablan de moda y convocan a diversos participantes del medio siempre debaten acerca de la contingencia en cuanto a qué modelos son más famosas en el momento, la calidad de cierto material de una marca y por supuesto, de las publicaciones impresas. Hace rato que Vogue US o la revista Vogue norteamericana, la clásica comandada por Anna Wintour, se mantiene como blanco de críticas por diversas elecciones y ahora la cuenta de Instagram @makevoguegreat y el sitio web www.makevogue.us llevaron el debate a una sátira en Internet.
A través de diversas fotografías que critican a diseñadores, fotógrafos y hasta la propia Anna Wintour por sus decisiones, Make Vogue Great Again busca materializar los pensamientos de todos quienes piensan que cualquier otra publicación Vogue de alrededor del mundo mantiene material más interesante que la versión norteamericana, la cual supone mayor popularidad pero también, una gran decepción para quienes fueron sus fieles lectores. Desde incluir a Kim Kardashian y Kanye West como protagonistas de una de sus portadas (“We are going to build a wall between @voguemagazine and @kimkardashian and we’ll make #KanyeWest pay for it!), hasta destacar a Jeremy Scott como nuevo rey de la moda (“Jeremy Scott is overrated. His designs are not good. We need to deport this fashion terrorist back to his farm in Kansas City”).
La cuenta en Instagram aun no lleva mucho tiempo pero ya ha sido destacada en algunos sitios web, especialmente por su producto estrella, el cual es ofrecido a la venta en la página makevogue.us: un gorro rojo con el bordado “Make american Vogue great again”. Así como el logo de Donald Trump, candidato a la Presidencia de Estados Unidos –pero también en 1980 de Ronald Reagan cuando ascendió al poder-, la frase ha servido para respaldar este proyecto que destaca, entre otras cosas, la llegada de Raf Simons al país para incorporarse a Calvin Klein, como un recurso que puede salvar la moda y su industria de las garras de la decepcionante Vogue.
Fotos: Instagram.