Inventados a principios del siglo XX, los Mary Janes son zapatos sinónimo de dulzura y estilo retro. Llamados así porque un personaje con el mismo nombre, creado por la compañía norteamericana de zapatos Brown Shoe usaba un par con las características del mismo, se han convertido en verdaderos elementos atemporales del guardarropa, y cada vez ganan más adeptas, especialmente en invierno.
Desde famosas hasta niñas pequeñas, los Mary Janes siempre aparecen en la escena acompañando vestidos, pantalones e incluso jeans. Durante esta temporada invierno en Chile, fueron altamente popularizados en campañas de grandes tiendas, e incluso en Falabella, por ejemplo, la marca Basement ha vendido versiones con doble correa en charol y cuero.
Una de sus características es que pueden ser igualmente elegantes y llamativos, y son muy versátiles si se les acompaña con pantys de colores y mini vestidos. Diseñadores como Marc Jacobs o Christian Loboutin les han dado el toque rockero acompañando las correas con piezas metálicas, y otros como Chloe los versionan en tonos cafés y grises para el toque romántico. Ya sea en dos tonos, versión peep-toe o tradicionalmente negros, definitivamente los Mary Janes se han mantenido año a año dentro de los más elegidos. Sólo basta con recordar el famoso episodio de “Sex and the City” donde Carrie Bradshaw contemplaba estupefacta un par de Mary Janes de Manolo Blahnik, como si fueran una gran leyenda.
