Del 13 al 17 de marzo se llevara a cabo Sao Paulo Fashion Week, la capital de Brasil será nuevamente la sede de uno de los eventos de moda más importantes y destacados de Suramérica. El día de ayer comenzaron las pasarelas y fueron cinco desfiles los que inauguraron la edición número 43 pero, aún quedan cuatro días para observar las propuestas de los diseñadores brasileros para esta temporada.
La firma Animale fue la primera en desfilar y en esta oportunidad presentaron a una mujer brasilera moderna que se inspira en países como Florencia, Venecia, Roma y Milán. Una feminidad sensual llena de volantes y encajes, el diseñador fue Vitorino Campos quién utilizó la geometría para dar equilibrio a las prendas, asimismo, fue la primera vez que la marca presentó un zapato bajo en la pasarela.
UMA por Raquel Davidowicz creo un desfile en la Pinacoteca en donde la luz natural creaba un ambiente mágico, la pasarela se llevó a cabo en el piso de arriba del recinto en silencio. El caminar de las modelos y el sonido de las cámaras fotográficas fue creando atmosfera y un poco de ruido. El concepto de las prendas fue relajado y contemporáneo, un estética minimalista en donde se preocuparon por la comodidad de la mujer brasilera. La colección en general mezclo las siluetas voluminosas y ligeras con una paleta que mezcla el color gris en sus distintas tonalidades.
La colección de João Pimenta estuvo compuesta de muchos elementos básicos como la chaqueta, camisa, impermeables y pantalones, muy al estilo casual y deportivo. Asimismo, los materiales que utilizó son biodegradables y tecnológicos tales como telas deportivas que actúan como membrana de nylon impermeable para la lluvia, las piezas eran un poco asimétricas llena de geometría que identifica al diseñador y arquitecto.
Lilly Sarti se inspiró en los cambios orgánicos, la evolución de las personas y las células para dar vida a su colección de invierno 2017, colores brillantes, cinturas definidas y una mujer glamurosa. El estilo formal chic estuvo presente en los vestidos y las faldas, los colores fueron apareciendo de a poco hasta encontrarse las combinaciones de rosa con tonos tierras y metálicos.
Por último, fue el turno de Osklen quién mezclo el cine y la música en el desfile, las prendas incluían una paleta de color variada en donde los tonos claros se relacionaban con colores más fuertes y brillantes. La deconstrucción de abrigos y gabardinas se observaron en el desfile, asimismo de los tejidos naturales. Uno de los accesorios que más llamo la atención fueron unos zapatos acolchados.
Fotos: FF Fashion Forward.
