A pesar de lo femenina que puede ser Suki Waterhouse, desde pequeña que ha cultivado un look tomboy, sobre todo gracias a su participación en torneos de karate o deportes como la escalada. No obstante, su figura delgada y rostro juvenil ha sido explotado en campañas de ropa y accesorios que buscan refrescar la imagen de distintas marcas. Así ha quedado en evidencia en marcas como Burberry, que –a pesar de sus 158 años de historia– se ha ocupado últimamente de moldear una apariencia juvenil a través de estos nuevos rostros pueriles.
Suki Waterhouse ha modelado para distintas marcas a través de sus pocos años de carrera. Comenzó a los 19 modelando para Marks and Spencer. Luego, pudo modelar para Alice+Olivia y Coast, al mismo tiempo que se dedicaba a hacer editoriales para revistas de moda.
Desde 2013 que Waterhouse es la cara de Burberry, donde ha compartido con su mejor amiga Cara Delevingne y Malaika Firth, entre otros. La campaña otoño/invierno 2014 ha juntado a ambas modelos para potenciar la marca gracias a la amistad que existe entre ambas. Sobre todo porque, en la actualidad, Cara y Suki viven juntas.
Además del modelaje, Suki ha trabajado en otros proyectos, como su carrera de actriz que la tiene rodando la película Insurgent, o su afición declarada por la fotografía, como la exhibición en Eb and Flow Gallery de Londres, titulada I’ll Be Your Mirror.
El último logro de Suki ha sido no solo modelar los diseños de otros, sino también crearlos. Para Superga, Suki Waterhouse ha diseñado una línea completa de zapatillas cuya denominación propia ha sido “pequeños corazones felices”. Cuando le preguntaron a Suki si le interesaba seguir en la senda del diseñador de moda, ella respondió: “Me encantó hacerlo, así que veamos qué sucederá”.
Imágenes: vogue.com/ trendencias.com/ dailymail.co.uk/ allylikes.com/ superga.co.uk