Los diseñadores más famosos del mundo no sólo tienen la tarea de diseñar para sus casas de moda o marcas propias, ya que su imagen ha pasado a ser casi tan valorada como sus diseños.
Se hicieron famosos por sus diseños, pero luego sus estilos de vida empezaron a ser seguidos por miles de personas alrededor del mundo, agregándole un valor a estos diseñadores, que ha hecho que su imagen sea usada en distintos objetos, que algunos incluso consideran como de culto.
Ejemplos hay varios: títeres de dedo, bolsitas de té, muñecos…
El más claro ejemplo de todo esto es lo que pasa con Karl Lagerfeld, quien parece gozar al verse retratado en un comic o en un peluche. Lo último que podemos ver es su imagen en una botella de Coca-Cola ligth, un diseño que el mismo creó.