Más de 86 portadas en 22 años de carrera, es el saldo que mantiene a Louise Dahl-Wolfe como una de las fotógrafas más emblemáticas de la era de oro de Harper’s Bazaar. A color o en blanco y negro, sus imágenes se han convertido en el registro perfecto del estilo clásico a revisar junto a otros como John Rawlings, gracias al impulso que obtuvo con la mítica editora de revistas Diana Vreeland.
A pesar de terminar su carrera en Harper’s Bazaar a fines de los años ’50, el estilo de Dahl-Wolfe también estuvo plasmado en Vogue o Sports Illustrated, donde retrató a personas del arte y la moda como Christian Dior y Coco Chanel, mientras su trabajó influenció a figuras posteriores como Richard Avedon o Irving Penn. Graduada del San Francisco Institute of Art en los años ‘20, Dahl-Wolfe también fue una de las responsables de lanzar a la fama a Lauren Bacall en su época de modelo, tomando y enviando la fotografía principal con la cual la actriz tomó su primera prueba de pantalla en Hollywood.
Más de 600 imágenes se mantienen en su portafolio, las que llenaron los estilos de modelos como Jean Patchett o trajes como los del New Look a través de las editoriales de revistas. La silueta femenina, los contrastes en colores y también los detalles orientales formaron parte de su trabajo, que se mantiene como importante referente histórico en el Museum of Contemporary Photography en www.mocp.org.
