Colaboración por Gabriela Ospino
327 años, doce generaciones y diez trabajadores. Así es Hosso la empresa textil que fabrica telas para firmas como Dior, Louis Vuitton y Chanel. Es uno de los negocios más antiguos de Kioto-Japón, un molino de textiles fundado en 1688 que hoy está dirigido por el director Masataka Hosoo, de 37 años.Masataka Hosoo es acompañado a trabajar la mayoría de los días por su abuela de 86 años, en la sala de la empresa se encuentra una fotografía de ella recibiendo un abrazo del cantante Pharrell Williams, también hay una foto de ella con Caroline Kennedy. Y es que Hosso es muy importante culturalmente para Kioto, tanto así que las celebridades, los políticos y los embajadores a menudo son llevados a visitar este lugar.
Las primeras telas del molino fueron unos kimonos tradicionales para los guerreros del Shogun y los samuráis del clan Tokugawa de la élite. El mercado de kimonos tradicionales ha disminuido un 90 por ciento actualmente, por ello, la empresa se están diversificando en tres áreas claves: el arte, la moda y los interiores.
Este tradicional negocio trabaja directamente con los clientes, sin distribuidores. Muchos de estos clientes son marcas globales de lujo, que compran telas de gama alta para los interiores de sus tiendas. Han trabajado en 50 tiendas Chanel y, para Dior, han fabricado telas para 19 interiores. También, la artista estadounidense, Teresita Fernández, trabajó con Hosoo para producir una escultura textil independiente titulada “Nishijin Sky”.
El molino proporciona textiles para diseñadores de moda. De esta manera, las telas han aparecido en el desfile de la Semana de la Moda en París de la mano del diseñador japonés Mihara Yasuhiro. Luisa Cavese, diseñadora italiana, también integró el trabajo de Hosoo en sus creaciones, con un borde en las telas precioso tejido con plata y oro. Asimismo, Masaya Kushino se asoció con la empresa para producir los zapatos que utiliza Lady Gaga en sus conciertos.
La producción textil de Hosoo requiere mucho tiempo y muchas etapas, son sólo 10 artesanos que trabajan en el molino, ellos son una mezcla de personas, desde jóvenes graduados de la escuela de moda hasta un ingeniero mecánico que sirve las máquinas. Es un proceso largo y arduo, en donde cada trabajador debe mantener su conocimiento en secreto para proteger la sustentabilidad de la empresa.
Sin sentir la presión de la industria artesanal cambiante, Hosoo se mantiene firme gracias a la innovación y tradición que han logrado adquirir en sus 327 años de experiencia.