Si pensamos en una sesión de fotografías de moda, pensaremos en al menos los siguientes componentes: vestuario, modelos, locación y por supuesto, una cámara y un fotógrafo que capture las imágenes, entre otros. Sin embargo, el estudio inglés ScanLAB pensó en llevar este concepto un poco más lejos. Así surge una interesante colaboración junto a Vivianne Westwood –diseñadora con marca homónima rupturista por excelencia– para producir la primera sesión de fotos de corte editorial realizada con escáners láser 3D, en vez de clásicas cámaras de fotográficas. El resultado: una interesante y dramática serie que plantea una nueva manera de ver el mundo.
ScanLAB es un estudio especializado en escáners 3D a gran escala, el cual permite una digitalización del mundo real a una alta –muy alta– resolución, permitiendo la obtención de datos visuales tridimensionales de alta complejidad y detalle. El uso de esta tecnología es variado y les ha permitido inmortalizar bastas extensiones de tierra en el Ártico para un proyecto de la Universidad de Cambridge, otras zonas de India, espacios interiores de museos, exhibiciones temporales –como la galería naval del Museo de la Ciencia de Londres, cerrado el año 2012 y al cual se puede seguir accediendo digitalmente– y vestuario, entre otros.
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Sin embargo, este año la tecnología de escáner láser 3D pisó el terreno de la moda de la mano de Brigitte Stepputtis, jefa de alta costura de la marca inglesa Vivianne Westwood y ScanLAB. Si bien la idea original de una producción de moda fue respetada, la omisión de una cámara fotográfica y su reemplazo por un escáner 3D generaba incertidumbre en relación al resultado. En blanco y negro –aunque con la opción de generar una imagen full color– la imagen captura la locación, modelos con sus vestuarios y dramáticas poses en formato dos y tres dimensiones.
Para Matthew Shaw, socio de ScanLAB, la tecnología de escáner láser 3D representa un nuevo medio visual que aun debe ser explorado y que se asemeja a lo que fue en su momento la fotografía.“El escáner láser que usamos actualmente es muy similar a la fotografía de principios de 1800’s. Tenemos diez cajas de equipos que pesan 15 kilos cada una. El proceso no es instantáneo; cada proceso de escaneo puede tomar entre 15 minutos y dos horas. No es como la instantaneidad a la que estamos acostumbrados con nuestros teléfonos; es una tecnología en su infancia, pero esperamos que llegue ahí eventualmente”, comenta en una entrevista realizada para Dezeen.
Así, nos encontramos frente a una herramienta que ha rendido sus frutos en otras disciplinas como las artes, arqueología, ciencias y arquitectura, por nombrar solo algunas. Pero ¿se constituirá como un nuevo lenguaje o soporte visual dentro de la moda? ¿Veremos el alcance de esta tecnología expandirse dentro del terreno de la alta costura o prêt a pòrter actual? Por el momento abrimos los ojos expectantes a ver dónde nos podrán llevar estos avances.
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Imágenes: Dezeen
