En el mundo de la extravagancia y vanguardia de la moda, nadie sabía hacerlo mejor que Alexander McQueen. Cuando el inglés necesitaba traducir sus fantasías a través del maquillaje, recurría a un delicado artista que comenzó su carrera durante los ’80 y que se ha transformado en uno de los más famosos y divertidos a la hora de trabajar: Topolino. Aun cuando su vida personal se mantenga como un misterio, es su trabajo el que habla de colores, formas y originalidad única y apreciada por varios artistas.
Mario Testino, Nick Knight, las revistas I-D y The Face, entre otros, son fanáticos del trabajo de Topolino. Son varios los diseñadores que han preferido tener su visión sobre la creatividad a la hora de armar un desfile, pues el maquillador no teme poner desde pétalos en forma de pestañas hasta guiños a las tribus más aisladas. El año 2002, una recopilación visual de su trabajo quebró el misterio con respecto a su carrera, a través de la editorial Assouline; “Make-Up Games” fue así publicado para deleite de los maquilladores que siguen sus pasos. El “hijo espiritual entre Jean Cocteau y el ratón Mickey”, como él mismo dice, encarna a la perfección el espíritu de los club kids ingleses que jugaron con su imagen cuando el comenzó su carrera.
Dentro de las pocas entrevistas que ha dado en su vida, Topolino cuenta que la inspiración para sus trabajos la encuentra en las calles. Por ahora, las revistas son las que se han beneficiado con el talento y experiencia del artista, quien no duda en utilizar desde glitter hasta estrellas pegadas, pasando por lentes de contacto o cualquier tipo de material en el rostro y cuerpo de las modelos. La revista de Carine Roitfeld, CR, es una de las que más han contado con su colaboración en la actualidad.
Fotos: Calliste Agency.