Era el día del cumpleaños de Gianni Versace, el escogido por Donatella para celebrar por primera vez un show Pre-Fall. Y no fue en cualquier lugar, sino en Nueva York, el mismo desde donde se realizan las operaciones de la marca desde que la hermana del fallecido diseñador vendiera la casa a Michael Kors por poco más de dos billones de dólares. Un montón de hitos reunidos en un solo lugar, dieron paso a un estilo muy mezclado, remixado y también, donde vimos un nostálgico #ItsNotTheSameButItsTheSame.
El vestido más famosos de todos los tiempos, por el cual inventaron Google Images, es definitivamente el que llevó Jennifer Lopez en 2000 en los premios Grammy. Allí decidió llevar un vestido de Versace de escote infartante, en verde tropical. Ese mismo vestido de la colección fue replicado en su silueta para esta colección, bajo distintos estampados, pero un con guiño inolvidable: lo llevó la modelo Amber Valletta para cerrar el show, la misma modelo que llevó el vestido verde en 1999 cuando se mostró por primera vez.
Además de este guiño, el show contó con diseños que si bien tuvieron homenajes al pasado de la marca, si mezclaron estilos de otras firmas: por ejemplo, el cuero sensual que hemos visto últimamente en Tom Ford, junto con su chillón estampado animal print, estuvieron presentes. También uno que otro look estilo Gucci, con su mezcla de colores llamativos y hasta un pañuelo en la cabeza. Pero los invitados se robaron miradas de manera definitiva: Blake Lively, Diane Kruger y Norman Reedus, Bradley Cooper, Lupita Nyong’o y especialmente, Kim y Kanye, los que posaron por un buen rato delante de fotógrafos.
Fotos: Runway y DailyMail.