Es atrevida, le gusta el kitsch lujoso del estilo hip hop y además, no tiene miedo de cambiar de peinado, color de pelo y enfundarse en trajes futuristas metalizados. Brooke Candy saltó a la fama gracias al video de Grimes “Genesis” el 2012, pero su carrera ha sido construida, paso a paso, a través de makeovers, editoriales y por supuesto, una bullada carrera como desnudista en Los Ángeles, Estados Unidos.
Al igual que en años anteriores junto a Lady Gaga, Nicola Formichetti es uno de los estilistas aliados de Brooke en conseguir su ansiado paso a la fama. Con él ha llevado desde aplicaciones brillantes en el rostro hasta convertirse en una especie de madame en sesiones de fotos junto a hombres desnudos. Pero ese tipo de detalles no extrañan cuando sabemos que su padre fue uno de los grandes empresarios del imperio Hustler, el mismo de la revista pornográfica y casinos que hoy se dedica a manejar y que la llevó desde pequeña a compartir con el famoso Larry Flynt. Sin embargo, la carrera de Candy también ha tenido encuentros directos con la moda: alguna vez realizó trabajos de interna para Rachel Zoe. “No se como tiene tanto éxito con su imperio; su línea de QVC es horrible”, dijo Brooke en una entrevista el año 2013.
Steven Klein, el famoso fotógrafo de la revista W, es otro de los que siempre colaboran con ella a través de sus atrevidos proyectos. Videos musicales como “Opulence” la tienen adelantando lo que será su disco a aparecer este año, el cual cuenta con el apoyo de Sia, la misma del hit “Chandellier”. Pero otro trabajo salió al camino de Candy el 2013: se transformó en rostro de los accesorios Diesel, marca que lidera su estilista. Así, con el pelo corto y recordándonos que Madonna no ha sido la única que llenó de sexualidad la música, Candy promete convertirse en algo más que una insinuante rapera que ya ha trabajado con Kylie Minogue.
Fotos: TheFusionMag, Thefashionspot, LA Weekly.
