La deconstrucción es la base de la marca Maison Martin Margiela, mientras el exceso va de la mano de la obra de John Galliano. Cuando ambos estilo se unen, deberían producir originales y llamativos trajes, algo que este martes el mundo de la moda vio con ojos de emoción ante el regreso del inglés. Vestidos de gala bajo la firma Artisanal, la línea de alta costura de Maison Margiela, caminaron en la pasarela montada en el Buckingham Gate de Londres, en el triunfal regreso de Galliano a las canchas de la industria.
Si bien las dudas de un principio eran obvias –ya que el estilo Margiela es más minimalista que el Galliano–, el primer look de la pasarela lo adelantó todo: el diseñador, quien anteriormente fue Director Creativo de Givenchy y Dior, se apropió del archivo y look Margiela para desplegarlo con fuerza y sin sutilezas. El maquillaje fuerte de la mano de Pat McGrath en tocados, peinados e incluso pedrería en el rostro, logró que este se unieran a colores como el rojo más intenso y el gris en capas para dar cuenta de que pese a todo lo que le ha pasado, Galliano no piensa en conformarse y bajar el volumen de su estilo.
En 1989, el primer show de Margiela –diseñador belga y fundador de marca, que antes había sido pupilo de Jean Paul Gaultier–, veía como las camisetas tatuadas y los peinados avant garde se mezclaban con su propuesta. Un pequeño guiño a ese estilo inconfundible se vio hoy también en la primera colección de Galliano para la casa de modas belga-francesa.
Algunos momentos evocaron la simpleza de la silueta del diseñador belga, mientras otros recordaron el atrevimiento de las capas, la sensualidad menos obvia y lo teatral que el inglés le impregnaba a las pasarelas. Al igual que en los desfiles de comienzos de la marca, Galliano respetó la deconstrucción y los momentos más originales, y cedió ante la mezcla entre telas, materiales y zapatos de alto nivel, pero siempre bajo sus propias normas de elegancia; con plástico, tul o animal print, la mujer Margiela de Galliano siempre sabe destacar con refinación y tampoco le importa el que dirán.
Fotos: Style.com, Opening Ceremony,