Seguimos revisando la historia del vestuario de nuestro país y hoy damos una segunda mirada a la época de La Colonia viendo en detalle el look y la historia de dos personajes femeninos que fueron conocidos en este período.
La Quintrala
Es más conocida como Quintrala pero su nombre real es Catalina de los Ríos y Lisperguer, terrateniente chilena que vivió desde 1600 hasta 1665, es famosa por su belleza y la crueldad con la que trataba a sus inquilinos. Se convirtió en un ícono del abuso y la opresión colonial y su nombre quedo plasmado en nuestra cultura popular como referente de una mujer perversa y abusadora, esta fama también tiene relación con el final que tuvieron sus amantes, se dice que alrededor del año 1624, Catalina invitó mediante una carta, a un rico feudatario de Santiago, luego de “intimar” lo mató a cuchilladas y culpó a una esclava por el crimen, que fue ajusticiada en la Plaza de Armas.
También se cuenta que golpeó y apuñaló a un tal Enrique Enríquez, de la Orden de Malta, un antiguo amante que jugó con sus sentimientos, además Enríquez habría osado sacarle en cara supuestos amoríos con el fraile Pedro de Figueroa, quién era el amor platónico de Catalina.
La Monja Alférez
Su nombre real es Catalina de Erauso y es una española de familia acomodada que quería realizar actividades que estaban destinadas de manera exclusiva para hombres. Por su rebeldía los padres la enviaron a un convento del que escapó para comenzar a aventurar por diferentes ciudades de España vestida de hombre y haciéndose llamar Antonio. Una de sus aventuras la hizo embarcarse hacia América como grumete, primero estuvo en Cartagena de Indias, luego en Perú para finalmente llegar a Chile a combatir al pueblo araucano y es en la Batalla de Valdivia que adquiere el grado de alférez.