Julia Clancey es una diseñadora autodidacta del Reino Unido que actualmente vive en Los Ángeles. Sus colecciones han estado presentes en London Fashion Week y se han publicado en revistas como Vogue y ELLE. La esencia de la marca es el lujo y el glamour atemporal, los vestidos hechos a medida son populares en la alfombra roja con clientes privados y celebridades por igual. Quizás una de las prendas más relevantes de la diseñadora son los turbantes.
En el 2016 fue la ganadora del concurso ‘Designer for Tomorrow’ y además se ha llevado los premios del International Fur Federation y SAGA Furs. Edda Gimmes es una diseñadora noruega con bocetos originales y creativos; Alber Elbaz es su mentor. The New York Times en 2016 la consideró como uno de los 10 diseñadores emergentes que hay que conocer. Además consiguió traspasar sus dibujos del cuaderno a la pasarela participado en la London Fashion Week, donde también obtuvo el reconocimiento de uno de los 50 diseñadores emergentes más destacados a nivel internacional. Incluso sus imperfectos pero perfectos diseños se colgaron durante el festival de moda de Oslo, en una exposición que llevó por nombre Uncontaminated. También ha vestido a celebridades como Gigi Hadid y Lady Gaga, sus firmas de diseño hasta ahora parecen ser ilustraciones a mano, colores divertidos y detalles de trompe l’oeil. Leer Más
Para celebrar la colección AW18 de Gucci, la firma destacó el trabajo de tres jóvenes artistas británicos que utilizan su arte para iniciar conversaciones sobre identidad, libertad y autoexpresión. Es en esta categoría donde entra Connor Kawaii: modelo, artista y patinador de 19 años. Luego que una lesión relacionada con el skate dejara a Kawaii con una muñeca rota y con reposo por un mes, decidió centrarse en idear una nueva empresa que combinara el skate y los collages.
El desfile de Louis Vuitton en el marco de Paris Fashion Week demostró que un traje aun tiene el poder de impactar. El diseñador Nicolas Ghesquière presentó una colección futurista y autorreferencial que mezclaba geografía y tiempo, pero uno de los puntos a destacar fue el casting del show.
La estética no solo es importante para definir a un artista y hacerlo más llamativo, sino también como una herramienta de protesta. Para Björk, el vestuario ha sido siempre algo importante que extiende su personalidad, pensamientos y sobre todo sus eras, mientras nos topamos con ella en un momento donde la feminidad parece ser el punto focal. Así, el traje estilo vagina que llevó en todo lo que es Utopia, su nuevo disco, es obra de la italiana Micol Ragni.
