Amo los realities de moda. Puedo estar horas enteras viendo America’s next top model, vi entero el insoportable She`s got the look, e incluso le di una oportunidad al menos-que-perfecto Stylista. Sin embargo, mi corazón pertenece a sólo uno de ellos, y aunque mi fidelidad ha sido menor en las últimas temporadas, Project Runway es simplemente mi favorito de todos los realities de moda que han pasado por la historia de la humanidad. Es sin duda lo mejor de lo mejor que nos ha entregado el género.
¿Cual es el secreto? No son los dramas personales de los diseñadores, ni las peleas, ni lo atractivo de los personajes (de hecho, quizás que los personajes no sean atractivos ha sido parte del encanto). Es, simplemente, que viendo éste programa uno puede ver gente sumamente talentosa y que ama lo que hace, haciendo milagros en tiempos récord. Ser testigo de ese proceso es mágico y constituye la mejor televisión de todas.