Por Coni, Mint is the new black
Vengo de una familia en la que no hacer ningún tipo de ritual en el momento en que justo dan las 0:00 del nuevo año equivale a jugar a la ruleta rusa o a dejar la plancha prendida. Por eso, año tras año salgo a la calle con una maleta, pongo cosas de oro (o “oro”) en las copas y mis calzones suelen ser amarillos.
Pensando en mis deseos para el próximo año, no difieren mucho de lo que queremos la mayoría de las personas: Salud, dinero, amor y prosperidad en general, pero si nos ponemos a hilar más fino, pienso en que cada una de nosotras, o nosotros debería, al menos tener un deseo del nuevo año relativo al la moda: ¿Que me gustaría a mi? Por supuesto, uno es siempre crítico con su cuerpo, pero al final eso no tiene que ver con la moda. Tampoco valdrían las cosas imposibles como “Quiero ser más alta” ni cosas como “Quiero mejorar la relación con mi padre”, eso ya es harina de otro costal, y le sugiero que si tiene este tipo de deseos le pregunte sobre ellos a alguien más.
He aquí una lista de cábalas sin fundamento que creé para 3 deseos recurrentes investigados a mi alrededor:
1- Quiero cambiar radicalmente mi estilo (y/o, tener uno al fin): La cábala consiste en esto: Desde que usted está cenando con su familia o amigos, se viste tal y cual quiere pasar vestida la mayor parte del año 2009. No importa si el nuevo estilo consiste en dejar atrás el trajecito dos piezas que tanto le acomoda o los jeans que son tan salvadores, si usted decide realizar esta cábala, desde más o menos el 31 de diciembre usted andará con su nuevo estilo (es bueno haberlo pensado un poquito antes). Muchas personas a mi alrededor me han dicho “Me gustaría ser más reveladora, más sexy” o “me gustaría ser más femenina”, y ante al menos estos dos requerimientos, este es un día perfecto para empezar porque a mucha gente le importa más emborracharse que andar juzgando a los otros.
¿Quiere por fin dejar las zapatillas y ponerse a andar en tacos? El 31 de diciembre. ¿Quiere dejar el estilo juvenil y ser más adulta? El 31 de diciembre. ¿Quiere empezar a vestirse como su ídola Carrie Bradshaw (o Beyonce, o J-lo, o Camilla Parker Bowles?) El 31 de diciembre. Dicen que como uno pasa esa noche es como va a pasar el año, asi que algo de asidero tiene esta cábala. En todo caso, si fuera así, yo pasaría todos mis años pasadita de copas y buscando locomoción colectiva, así que, ejem, bueno, sigamos con nuestro segundo problema recurrente:
2- Quiero parar de gastar compulsivamente: Esto también requiere de preparación. Usted guardará todas las cosas que no se ha puesto todavía y que objetivamente no se va a poner nunca (ropa que compró más chica para animarse a adelgazar, la polera de dos lucas de Patronato que objetivamente le queda mal, etc, etc etc.) y los va a guardar en una bolsa junto a cosas que si ocupa pero de los que está aburrida, en una proporción de 3:1. Al dar medianoche, esta bolsa va al tacho de basura de la calle, y no vale espiar quién se la lleva. Piense en lo feliz que va a hacer al potencial beneficiado, y le servirá de catarsis. Aparte limpiamos un poquito el clóset y le da para pensar más antes de sacar la tarjeta poquito pues, si estamos en crisis.
3- No se que me queda bien y que me queda mal: Ésta cábala es más una práctica que una superstición, pero ¿Ha escuchado eso de que los borrachos y los niños dicen la verdad? Si usted tiene la suerte (relativa) de estar rodeada de borrachos ese día, ¡no la desperdicie!, pero piense en que si sus amigos borrachos se ponen en plan “cariñoso” con cualquiera el día del año nuevo, puede que no le digan toda la verdad. En vez de eso, recomiendo preguntarle a un niño (hombre) de 11-14 años (primos, hermanos, o sobrinos). Ya tienen la medida suficiente de lo lindo y lo feo, al menos en cuanto a mujeres, y les da lo mismo caer mal (están en la edad del pavo). Así que a ponerse la tendencia controvertida y a preguntar no más, sin miedo. Si el niño/borracho confirma sus miedos o su buen juicio, durante el año acuérdese de éste episodio y de ahora en adelante siga sus instintos. Le aseguro que la mayoría de las veces, va a acertar.
Bueno, éstas son mis pequeñas contribuciones al bienestar de la población en el próximo año. Les deseo lo mejor a todos los lectores de Viste la calle.com, sigan leyéndonos y siguiéndonos el 2009. ¡FELIZ AÑO NUEVO!