Peinado, maquillaje y ropa se mimetizaron en la piel de Frida Kahlo dotándola de una de las estéticas más reconocibles del arte. La pintora de origen mexicano se convirtió en símbolo de toda una generación y posteriormente, en un icono de moda. Por ello, vale la pena revisar y visitar la muestra “Las apariencias engañan: los vestidos de Frida Kahlo” en el museo de la artista en Ciudad de México.
Desde fines del año pasado y hasta enero del 2014, todos los vestidos y trajes que llevó la esposa del muralista Diego Rivera estarán distribuidos en diferentes salones, donde también aparecen sus accesorios y el corset de yeso que debía llevar luego del accidente que sufrió en su adolescencia. Más de 300 prendas que pertenecieron a Kahlo y que se encontraban ocultas en un cuarto de La casa azul, ahora están a disposición de los visitantes del mismo lugar.
El Museo Frida Kahlo o Casa Azul es el mismo lugar donde la artista vivió junto a su esposo Diego Rivera en los años ’50. Allí, repartidas en cinco salas especiales, toda la historia de este icono aparece influyendo el trabajo de diseñadores posteriores, artistas y amantes de su propio estilo, en una composición llevada a cabo por la curadora del museo, Circe Henestroza. Cada prenda que Frida utilizó como capa para cubrir sus imperfecciones físicas, forma ahora parte de un invaluable registro abierto al público.
