En los ’60, la histórica aparición de la minifalda gentileza de Mary Quant no sólo dio paso a controvertidas discusiones de moda y moralidad –sí, existían grupos en contra de su uso-, sino también a otras modas que expresaron lo opuesto: la maxi falda. Aunque su fama no fue directamente originada para atentar contra la mini, sí muchas mujeres comenzaron a preferir este estilo porque se sentían más elegantes y sofisticadas que con un vestido o falda que dejaba ver sus piernas. Pero la maxi falda fue creada muchas décadas antes, reapareciendo cada cierto tiempo para ser reversionada popularmente en su versión plisada.
En los ’40, los vestidos plisados de lamé y escotes pronunciados eran un must que las actrices de Hollywood buscaban lucir. Desde Joan Crawford hasta Marilyn Monroe en los ’60, todos los diseñadores buscaron la mejor versión de sus faldas largas para vestir a las estrellas y de paso, aparecer en las revistas de moda. Y así lo consiguieron unos pocos, entre ellos Yves Saint Laurent, Bill Blass, Givenchy y Chanel, quienes combinaron el estilo con chaquetas cortas estilo peacoat, delicados tops o simplemente, un tradicional trench. En la temporada primavera verano 1990-1991, el boom de las tendencias fue la reaparición de estas faldas de la mano de diseñadores como Ungaro y Christian Dior, que buscaron equilibrar esas grandes hombreras de las chaquetas de lana con la delicadeza y suavidad de la maxi falda plisada de gasa.
Y en nuestros días, el boom de la falda plisada recién comienza. A fines del año pasado comenzamos a notar esta tendencia en el street style de varios sitios web, siempre de la mano de las editoras de moda como Zanna Roberts de Elle o fashionistas destacadas como Diane Kruger o Kate Bosworth. Pero quizás la reina de esta prenda sea Alexa Chung, quien ha lucido en más de una ocasión su combo favorito para vestir: polera rockera, blazer y maxi falda plisada. Prenda ideal para la primavera, ya que se lleva con una blusa o polera delgada sin mayores accesorios, también puedes llevarla en invierno gracias a las diferentes opciones abrigadoras de lana y a la magia de las capas.; así lo demuestran varias fotos de estilo callejero.