Todas las temporadas, leo minuciosamente las nuevas noticias y tendencias de maquillaje que traen las revistas, los blogs y las pasarelas, y aunque quede informada como una alumna ejemplar sobre las nuevas tendencias en make up, solo en algunos casos extremos, casi de vida o muerte, salgo de mi maquillaje de dia a dia que combina con todo (Opción 1: Delineador negro+ rimmel + colorete/ Opción dos: Rouge rojo/rosado + rimmel).
Sin embargo, hace ya un tiempo me prometí a mi misma ser más innovadora con mi maquillaje (y por fin empezar a usar todo eso que tengo guardado en el cajón), y ultimamente encontré varias tendencias dando vuelta a las que, al menos, les daré una oportunidad a puertas (del baño) cerradas. Vale la pena probarlas, aunque en el proceso quedemos más como un travesti que como Chanel Imán, total, con un poco de desmaquillante y voluntad sale todo. Tampoco no es que nos estamos tatuando, ¿no?
1) El ojo rojo: Controvertida primera opción, sin duda, pero que me parece muy prometedora. Me acuerdo que cuando estaba en el colegio, las más dark cambiaron brevemente la sombra negra por la roja, delineando, eso si, todo el contorno del ojo, lo que simulaba algo así como una alergia o haber llorado toda la noche. La nueva opción no pretende, por suerte, hacernos ver más enfermas (que no se porque estaba tan de moda a fines de los noventa), sino que apela más a complementar con fuerza la elegancia de los colores claros y camel que se ven en la ropa, tal como se vio en los desfiles de Carolina Herrera y Derek Lam.
2) Labios oscuros y opacos + ojos brillantes: Este look ha estado dando vueltas desde hace un tiempo, y promete por fin llegar a las mujeres reales este invierno (del hemisferio norte), lo que ha resultado una tarea difícil porque, aunque se vea increible y poderoso en una editorial o una pasarela, no es fácil andar por la vida con una boca color ciruela oscura, o o haciendo las compras del mes con ojos perlados. Aunque tampoco no es tan extremo como para asustar a nadie, si es muy sofisticado y perfecto para la noche. Un par de datos clave: En este caso la boca no es negra (no se trata de ser una gótica adolescente), sino de tonos rojos muy oscuros, incluso cercanos al morado. También, los ojos no son un par de parches blancos, sino que lo mejor es dejarlos en un tono brillante que no compita con la boca, pero que la complemente bien. Hay un muy buen tutorial para este look aquí (en inglés).
3) El delineado superior blanco: Ok, esta opción suena terrible y demasiado cercana a la ya clásica linea celeste claro que sigue haciendose Quenita Larrain (posiblemente uno de los ejemplos de mal maquillaje más claros y sostenidos en el tiempo en la historia nacional). Tampoco me refiero al truquito del delineado blanco sutil en el interior del ojo para lograr una apariencia de “ojo abierto” que se ha masificado de a poco, sino a una linea clara y gatuna en el párpado superior, igualita a la negra que se hacen todas las mujeres del mundo al menos alguna vez en la vida, y también igualita a la que se vió en el desfile de Viktor y Rolf en octubre pasado. Ok, quizás la pruebe y me quede terrible (es lo más posible, porque no pienso teñirme las cejas rubias), pero, ¿no dan muchas ganas de hacerlo cuando vemos la imagen de Lindsey Wixson en la foto de arriba?