Un recorrido por los trajes típicos que nos han dejado las representantes chilenas a Miss Mundo y Miss Universo

Un recorrido por los trajes típicos que nos han dejado las representantes chilenas a Miss Mundo y Miss Universo

Como en cada edición del concurso belleza, las candidatas además de desfilar en traje de baño y vestido de noche, deben mostrar un diseño inspirado en su país. Así el llamado traje típico, y su pasarela, se ha vuelto una sección destacada en el certamen, en la que no solo destacan las misses con piezas únicas, novedosas y confeccionadas a medida, sino que también brillan los diseñadores con su creatividad, reinterpretación y talento.

Si hay algo claro es que el traje típico ha ayudado enormemente a que otras culturas y países conozcan un poco más de nuestro país. Por esto hoy quisimos recordar algunos y detenernos en sus principales características.

El folclor como inspiración 

Cuando comenzó  la confección de trajes típicos de Miss Chile para Miss Universo y Miss Mundo, los conjuntos folclóricos fueron la principal inspiración. De esta forma, los diseños inspirados en las “chinas” y en el huaso, se apoderaron rápidamente de la pasarela. Este último ha sido uno de los más usados y un ejemplo de este es la versión masculina que decidió lucir  Hellen Toncio, quien a punta de pantalón, manta y sombrero desfiló en el Miss Universo 2014.

¡Vivan los pueblos originarios!

A finales de los 70, la inspiración Mapuche fue la carta de presentación de Miss Chile. Así en 1977 Priscilla Brenner llevó una túnica  tejida a telar en tonalidades rojas y moradas, la cual estuvo decorada por los accesorios metálicos propios de los araucanos. A inicios de los 80, y gracias a Sergio Soto, diseñador del Ballet Folklórico Nacional, volvimos a ver un traje de araucana. Este lo lució Soledad Hurtado y además de ser un reflejo étnico, estaba acompañado de auténticas joyas. 

En 1982 Yenny Purto vistió un  atuendo de Luciano Brancoli. A partir de  capas laminadas de cobre, el diseñador buscaba realizar un homenaje a la mujer mapuche y también al  principal metal de exportación chileno. 

Los 80’ fueron sin duda el año de las representaciones en honor a los araucanos, y uno de los más recordados es el de Marco Correa. Un diseño que lució nada más y nada menos que nuestra única Miss Universo, Cecilia Bolocco (1987). En este le dio un giro a lo tradicional con un toque sexy, producto de la ajustada túnica negra con  escote en su pierna izquierda, cubierta de joyas de plata. Todo en una apuesta que prometía y generó una innovación a lo tradicional.

En los 90 Miguel Ángel Guzmán fue el encargado de diseñar el traje de araucana que lució  Marcela Vacarezza (1992). Un vestido largo y negro, en el que el protagonista eran las plumas del tocado y joyas confeccionadas por Mario Infante. El atuendo se completaba con un par de zapatos rojos, símbolo de la sangre araucana. 

Pero no todo ha sido en representación de los mapuches, ya que los pascuenses también han sido un foco de inspiración y ejemplo de esto son los diseños utilizados por dos reconocidas figuras del espectáculo:

Savka Pollak en 1993 lució como una pascuense en un ceñido diseño de Miguel Ángel Guzmán. En un pseudo vestido color lila, con escote, cerrado hasta el cuello, y decorado con figuras de la isla, Savka se subió a la pasarela. Su atuendo estaba acompañado de un tocado prominente.

10 años después, en 2013 y ahora no en un Miss Universo, sino que en un Miss Mundo, volvimos a ver sobre la pasarela un atuendo pascuence. Esta vez de la mano de Camila Andrade, quien llevó un traje de plumas en color cobre diseñado por Luis Uribe. Este año además de destacar con el vestuario, Andrade fue elegida para ser una de las 10 candidatas que presentará su baile típico en el “Baile de las Naciones” durante la Gala Final del Concurso, adquiriendo su traje un mayor protagonismo y pocas veces visto entre las cantidades nacionales.

Mitos y leyendas, la temática de los últimos años

Chile está rodeado de mitos y leyendas. Creencias populares que se han arraigado a distintas ciudades y que hoy forman parte de la idiosincrasia del país. Tanto así que la leyenda de Trentrén-Vilu y Caicai-Vilu, así como también la del Alicanto han sido foco de inspiración dos años consecutivos y bajo el mismo creativo: Bernardo Santander 

Catalina Cáceres y la leyenda de Trentrén-Vilu y Caicai-Vilu.

Natividad Leiva y la leyenda del Alicanto.

Un guiño a la innovación:

Si de recordar se trata no podemos dejar de mencionar dos trajes que sin duda marcan una ruptura, ya que se alejan de los patrones y temáticas a las que estábamos acostumbrados. Y es que así como en 1982 Luciano Brancoli le rendía honores al cobre, en 2011 La modelo y actriz Vanessa Ceruti sorprendía con un  original modelo de minero, realizado por los diseñadores Hernán Vecchi y Eduardo Cerda. El atuendo realizado a partir de  incrustaciones de metal, bordados, cobre y pedrerías, fue una oda a los 33 mineros chilenos. 

Historia y tradición, así podríamos resumir en dos palabras lo presentado por  María Jesús Matthei en 2013. La chilena llegó hasta la pasarela como un “Chinchinero”, -un típico músico callejero que porta un bombo y platillos en su espalda-. El diseño, además de contar con estos elementos en una versión actualizada,  estaba confeccionado por una malla de latex pintada a mano con motivos de una enredadera de copihues, en colores verdes, rojo y dorados. 

Créditos fotos: Fadil Berisha, Agencia Uno.

Comentarios

Kevin Cortés
Kevin Cortés
Periodista con mención en Comunicación Digital. Máster en Fashion Marketing por Elle y la Universidad Complutense de Madrid. Editor de moda y encargado de comunicaciones. Especialista en email marketing. Amante del vestuario y el styling masculino. Puedes seguirme en @xkevincortes

También te puede interesar