Fotos: María José Olivera (@mjoseolivera) desde Londres.
Ubicado en Knightbridge a pasos de Hyde Park y rodeado de las casas más lujosas de Londres, ahí se encuentra Harrods, uno de los almacenes más antiguos del mundo. Sus 12 mil empleados atienden alrededor de 15 millones de personas cada año, lo que se traduce en más de 2 billones de libras esterlinas en compras.
Desde 1834 que Harrods se ha desarrollado en un mercado difícil de abarcar. La longevidad de su existencia se debe principalmente a que se ha adaptado a los tiempos y marcado pauta en el área de la moda y lujo. Así es como a fines de 1800 tuvo la primera escalera mecánica, vendió el oso que inspiró al creador de Winnie de Pooh, o incluso, vendía animales entregándole un elefante a Ronald Reagan.
Chanel, Dior o Louis Vuitton son solo algunas de las cientos de marcas de lujo que se pueden encontrar en este lugar. Dentro de sus excentricidades cuenta con un sector inspirado en Egipto con una escalera mecánica que con la misma velocidad del rio Nilo. También hay una sala a -80 grados Celsius para quienes quieren tener la piel suave, limpiar las vías respiratorias o dormir mejor.
A diferencia de otros almacenes, Harrods, cuenta con distintas temperaturas según cada sección. Así es como, por ejemplo, el área de trajes de baño tiene aroma a coco y está acondicionada en 25 grados para que los clientes puedan sentirse más cómodos a la hora de probarse una prenda.
Las estrellas como Beyoncé, Cara Delevigne o, incluso, la Corona Britiánica puede optar por un exclusivo ascensor hasta el sexto piso donde se encuentran las colecciones ‘Haute Couture’ de cada diseñador, tienen un salón sin otros clientes y pueden disfrutar de cócteles mientras compran.
Sin embargo, existen otros visitantes en Harrods que prefieren un personal shopper o simplemente llaman para que les tengan ciertos productos listos en el probador para que todo sea más rápido y eficiente. Y, aunque esto suene un poco exagerado, la verdad es que este tipo de acciones se rigen bajo lema del centro comercial: “Todo para todo el mundo en todas partes”.
Actualmente, el almacén está en un proceso de remodelación, la que demorará alrededor de cuatro años, ya que además de incluir nuevos espacios y materialidad de construcción, también implica cambiar de sector áreas completas. Un ejemplo de ello es la ropa de hombre que quedará con todas las marcas en sólo un piso y no dividido en tres como hoy en día.
