Entrevista al diseñador Diego Labrín, a propósito de su primer libro “Procesos de Moda Multifocal”

Entrevista al diseñador Diego Labrín, a propósito de su primer libro “Procesos de Moda Multifocal”

Hace un tiempo conocimos a Diego Labrín, un diseñador de moda de origen peruano, que nos mostró en más de una ocasión su marca masculina “Ladrón de Guevara”. Pero hoy volvemos a hablar con él y no por sus colecciones, sino que por su primer libro “Procesos de Moda Multifocal: Aproximaciones Teóricas y Prácticas sobre Indumentaria Latinoamericana en el siglo XXI”.

En este, Diego escribe desde su experiencia como investigador, docente y sobre todo como productor y diseñador de objetos indumentarios. Su principal fundamento es la necesidad de aplicar un pensamiento teórico en el diseño de modas, es decir, que en el diseño latinoamericano no solo se trabaje por estética y se considere la base social, cultural, política e histórica, al momento de crear. 

Para poder concretar “Procesos de Moda Multifocal”, contó con la colaboración de 14 proyectos de indumentaria de Latinoamérica, que cedieron sus imágenes para construir la metodología que se expone en el texto. Entre estas 14 marcas, se encuentra el proyecto chileno “Ingrato” de Sebastián Plaza.

“El motivo de incluir imágenes de estos proyectos, es para proponer un tipo de cambio en el formato libro. En Procesos de Moda Multifocal se entiende que ahora leemos viendo, es por ello, que los textos, antes de ser texto, son imágenes primero y texto después”.

El libro se va a presentar este 20 de julio en la Feria Internacional del Libro de Lima y el 30 de julio en el X Congreso de Enseñanza del Diseño en Buenos Aires. Además, Diego espera prontamente poder presentarlo en Chile. 

¿Qué te motivó a escribir “Procesos de Moda Multifocal”?

Los motivos fueron varios y de diversos orígenes. El motivo contextual y principal remite al hecho de que en Latinoamérica se han escrito muy pocos textos que intelectualicen el acto de vestirse y de determinar al indumento como un agente de interacción con el otro y de autoexpresión. Es por ello que quise compartir todo esto, que había estado acumulando tanto en mi faceta como estudiante, docente y diseñador.

¿En un libro escrito desde tu experiencia como diseñador?

Sí. Y también es un libro desde mi experiencia de investigador, docente y productor y diseñador de objetos indumentarios. 

¿Cómo se entiende el concepto de Moda Multifocal?

Varios semiólogos, incluyendo Biondi y Zapata, dos semiólogos peruanos citados en el texto, coinciden que la herramienta digital está modificando la manera en que aprendemos y en que codificamos y decodificamos información. Ya no podemos seguir hablando en nuestro contexto de moda, como se habló en el siglo pasado, dado que las maneras en que percibimos la realidad se encuentran en cambio constante y son modificadas por la herramienta digital a la cual estamos sujetos. A eso alude el término multifocal. No es un objeto literal, es mucho más poético que representacional, porque es percibido como una serie de interacciones yuxtapuestas y simultáneas. Considero que esta es una de las maneras en las que podemos, como contexto latinoamericano, convivir en un ecosistema global, ya que somos parte de este y tenemos que hacernos cargo de ello.

¿Cuál es el objetivo tras este libro?

El libro fue construido como una metodología abierta. Denominé metodología abierta a toda aquella metodología que es susceptible de ser modificada por sus actores y gestores en espacios y tiempos diferentes, y en constante cambio. Es por ello, que la colaboración de otros es muy importante, porque sin los otros este libro no podría ser.

¿Por qué razón decidiste acompañar los textos y la teoría con imágenes de proyectos de moda?

La razón fue poder proponer un tipo de cambio en el formato libro. En Procesos de Moda Multifocal, se entiende que ahora leemos viendo. Es por ello, que los textos, antes de ser texto, son imágenes primero y texto después. Se propone una diagramación a partir de una especie de “paralelismo formal”, a los dispositivos digitales con los que interactuamos nosotros y con el otro. Red (Daniela Choroco), fue la increíble diseñadora gráfica y diagramadora detrás de la premisa formal, y juntos pudimos construir un libro que propone un cambio de este formato.

De estos 14 proyectos de indumentaria de Latinoamérica, con los que has colaborado, hay uno chileno ¿Cómo es que llegaste a la marca Ingrato?

Con Sebastián Plaza (Ingrato), comenzamos a conocernos a través de Instagram y posteriormente, pude conocerlo de forma personal en un viaje que él hizo a Lima, en el 2017. Me pareció desde el primer momento una propuesta muy interesante, por la técnica ancestral latinoamericana, como lo es el acto de tejer, pero con una visión totalmente traspasada por su construcción espacio-temporal. Es una combinación de un contexto con varios referentes yuxtapuestos de diversas partes del planeta, y una reivindicación del lugar del tejido en sociedades industrializadas como un acto performático y de construcción de cultura colectiva.

Y a propósito de esto, ¿cómo ves la moda chilena y las marcas emergentes?

Considero que toda nuestra región está comenzando a entender este nuevo lugar del indumento, como medio de expresión del individuo en relación a un contexto. Es una de las principales razones, para poder entablar un diálogo en este libro sobre estas nuevas funciones y poder desaprender las convencionales.

En tu libro hablas de la necesidad de considerar el pensar teórico en el diseño de modas ¿Crees que en Chile se ve la moda desde la teoría, es decir, con esta base social, cultural, histórica y política que apoya el diseño?

Considero que sí desde un lado académico, pero no tanto desde el práctico. Es algo que traspasa a toda nuestra región, no solo a Chile. Estamos en el camino, sin embargo para ello las políticas públicas y de incentivos a los nuevos diseñadores emergentes, los microemprendedores del sector textil o a la investigación sobre el indumento, deberían ser áreas para continuar apoyando o ampliar su campo de acción. Al igual que el poder comunicar y hacer parte a toda la sociedad de estos nuevos modos y códigos de producción más intercambiables y lentos.

Ya diste el primer paso que es transformar, guiar y materializar algunas problemáticas en torno a los procesos creativos, ¿qué se viene ahora? ¿Cuáles son tus futuros proyectos?

Seguir haciéndolo y seguir fomentando. Seguir viajando por todos lados, enseñando y dialogando sobre la construcción del indumento tangible e intangiblemente. Ya no ejerzo la producción o diseño de ropa de manera tangible, lo hago desde otras aristas más interdisciplanarias y abstractas. Es como Bruno Munari alguna vez dijo: “El diseñador es el artista de la actualidad, no porque sea un genio, sino porque su trabajo entrelaza el arte y el público, porque tiene la humildad y la habilidad de responder a las demandas de su sociedad”.

Comentarios

Kevin Cortés
Kevin Cortés
Periodista con mención en Comunicación Digital. Máster en Fashion Marketing por Elle y la Universidad Complutense de Madrid. Editor de moda y encargado de comunicaciones. Especialista en email marketing. Amante del vestuario y el styling masculino. Puedes seguirme en @xkevincortes

También te puede interesar