El slip dress es probablemente la prenda que mejor define la estética de los noventa. Las alfombras rojas se llenaron de estos sencillos vestidos que enmarcan el cuerpo de las personas que lo usan. A diferencia del viso (prenda interior de satén o seda), el slip dress nació para exhibirse en público. Winona Ryder, Jennifer Aniston y Drew Barrymore son solo algunas estrellas que han lucido este vestido.
Japón ha sido cuna de grandes artistas y también de artesanos expertos en trabajar con madera, entre otros elementos. La ciudad de Okawa se jacta de tener la tradición más importante en cuanto a diseño y confección de muebles, algo que así quisieron resaltar en una llamativa campaña donde los gatos son los protagonistas. Porque la campaña tiene muebles para la mascota favorita de Internet en sus imágenes (y a la venta).
Vanina Rosenthal lo comentaba en su cuenta de Instagram: es indudable el revival de esta prenda que marcó los años setenta y noventa. La camisa que nació con vocación lencera y se convirtió primero en uniforme de trabajo de las clases populares, vuelve para ser una de las prendas del 2019.
María Ignacia del Castillo es estudiante de Diseño y encontró a través de su proyecto de título una interesante idea que lleva a la práctica: uniendo la moda sostenible y la nostalgia creó Relato @relato_dno. “El proyecto surgió de la investigación acerca de la moda sostenible y el vínculo emocional de las personas con su ropa, a partir de la investigación de estas áreas y los problemas ambientales que ha generado la industria, quise abordar el tema de la reparación como forma de darle una segunda vida a la ropa”, nos cuenta.
El top es Adidas, el pantalón es Sybilla, el banano de la calle y las zapatillas fueron un regalo. Lo Último que leí fue un articulo de nutrición. Soy Nutricionista.
